¿Qué es el ligamento cruzado?
El ligamento cruzado anterior es muy importante en la estabilidad de la rodilla. Tiene origen en el fémur e inserción en tibia y su función principal es evitar pasivamente que la tibia se desplace hacia delante. Es un tipo de lesión muy común en deportistas ante movimientos excesivos, combinados o forzados y saltos y recepciones. Todos ellos pueden producir un esguince o rotura de este ligamento.
El dolor y la pérdida de funcionalidad es inmediata, llegándose a notar y escuchar un chasquido. La inflamación aparece en el momento o a las pocas horas, así como una posible pérdida de movilidad en la articulación de la rodilla en función de la gravedad de la lesión.
Factores de riesgo
Se han determinado una serie de factores de riesgo que se pueden prevenir con un buen trabajo activo y correcciones oportunas.
Algunos de éstos son:
- Desequilibrios musculares en el miembro inferior.
- Calzado o material inadecuado.
- Como dato curioso, se estima que la prevalencia es mayor en mujeres debido a su anatomía.
Aun así, es un tipo de lesión muy común, en la cual, su principal tratamiento es la cirugía y una buena rehabilitación posterior. Aunque existen pruebas ortopédicas para diagnosticar una rotura de este ligamento, la resonancia es la prueba por excelencia más utilizada y en la que se puede observar si hay alguna otra estructura dañada.